Escuchando un disco tributo a Hola Yola en versión punk y rock, haciendo zapin por el canal retro de dibujos animados me acuerdo de Snarf... ese personaje súper preocupado por su pequeño León oh... como así recuerdo a Remi en su búsqueda intrínseca tal cual joven Marcos... ese Vonvolvi que siempre fue tan fiel al "caballero de los Autos" Optimus Prain... ese Pitufo Tontin con su fin de frase con mirada partida... el Coyote que siempre tenía más dinero para comprar accesorios que le sirvieran para conseguir atrapar al despreocupado Correcaminos... (continuará)
Mi habitación fue cuadrada, el inmenso televisor de borde de madera que aguantaba cada golpe del alicate para cambiar de canal entre esas dos o tres opciones de idiotizante diversión cambió poco a poco con esos libros cuadrados... pero aún vivo del vicio cuadrado y jamás lo dejaré.
Redacto esto en formato de máquina de escribir porque es una de las remembranzas que se me vienen a la mente con una silueta, que plasma pasión en cada tecla, a contra luz de una puerta entre abierta... y esta imagen de fondo resume los caminos de mi vida que me buscaron o quizás yo me tropecé entre ellos...
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